viernes, 13 de junio de 2008

Nunca digas nunca


Invisible airwaves crackle with life
Bright antennae bristle with the energy
Emotional feedback on a timeless wavelength
Bearing a gift beyond price, almost free...

-- Spirit of radio, de Rush
.
Who was the smart guy who invented days of the week? And why seven? Why not eight, or nine, or six? Probablemente se lo debamos a un antiguo egipcio borracho con sueños de grandeza y fetichismos con el número siete. Ojalá las cosas fueran como ese excelente capítulo de Doug que vi hace millones de años, en el que la semana consistía en ocho días, siendo 'divermingo' el octavo; el nombre podría cambiarse, y no tendría por qué ser un día de juegos y celebraciones, sino también de un descanso más revitalizador que el del domingo. Ojalá las cosas fuesen así. Pero no lo son, y tenemos que acostumbrarnos a un orden que no todos hemos decidido y al que billones de personas se adecuan cual autómatas descerebrados, por decirlo de la manera más sutil posible.

Y así podría continuar, cuestionándome no sobre el sentido de la vida sino sobre las actitudes y acciones de los seres humanos que me rodean, sean estos familiares, amigos, conocidos o desconocidos en general. Hay cosas inexplicables desde ciertos puntos de vista (actos, en su mayoría), cosas que muero por saber pero que por una u otra razón, que escapan a mi entendimiento, no consigo descifrarlas, no logro aprehender ese saber tan escurridizo. Y, como llevo diciendo ya varias veces, es extraordinario cómo las personas pueden sorprendernos tan cariñosa o desastrozamente, personas que creemos conocer hasta el hartazgo pero que de un segundo a otro nos son completos extraños. Right now all I can say is “what a disaster!”

1 comentario:

Hans Burkli dijo...

como te da la vida para buscar tantas imágenes? a mi no me da ni para escribir..

LinkWithin

Related Posts with Thumbnails