lunes, 15 de diciembre de 2008

¿Cuánto es suficiente?


Fácil la historia es más frágil
Que en cien mil papeles hechos para volar
-- Frágil, de Libido
Hoy comencé a pensar en mí mismo después de haber pasado algunos días en compañía de varias personas y le di vueltas a la manera como soy.

De manera general, me doy cuenta de que soy un alma solitaria, de que prefiero pasar más tiempo a solas que en compañía de otros, aunque ello no significa que siempre esté por mi cuenta en todo momento. Como cualquiera, me gusta pasar tiempo con mis amigos, divertirme en grupo (tal vez uno no muy cuantioso), pero no soporto hacerlo por mucho.

Convivir con cuatro personas y tener que ver a otras cinco más todos los días es un reto que tengo miedo de afrontar, pues sé que tarde o temprano comenzaré a perder el control y mis ánimos empezarán a bajar enormemente, por pensar en el mejor de los casos. Ya me cuesta salir a almorzar en grupo, organizarme en grupo y, más aún, desenvolverme en grupo. Sin embargo, estoy al tanto de que esta experiencia no ha llegado solo para molestarme.

Hace tiempo escribí un post en el que mencionaba un juego en el que se debía superar todos los miedos, y ahora lo traigo a la memoria como analogía. No es exactamente un juego, pero sí sé que todo lo que venga de aquí en adelante es una serie de pruebas en las que no solo se presentarán obstáculos sencillos, sino también fobias con las que tendré que aprender a lidiar o que, con esfuerzo, desvaneceré.

A manera de reflexión pensé lo siguiente: ¿Cuánto tiempo en completo aislamiento humano es necesario para que una persona se vuelva loca? Imagino que no mucho, ya que las relaciones sociales son imprescindibles en el desarrollo y mantenimiento de la psique, pero en mi caso, y en el de muchos otros, pienso que el resultado sería proporcional de pasar inmensas cantidades de tiempo al lado de otros, sean quienes sean. Quizás me equivoco; espero que sea así.

No hay comentarios.:

LinkWithin

Related Posts with Thumbnails